La belleza necesita poco para manifestarse, materia prima pura para que nos enseñe la maestría de la luz sobre los colores y el tacto del tejido.Ya los conoces, son nuestros animales que se pasean por nuestras mesas alardeando de su origen en Limoges, cuna de una de las mejores porcelanas 

del mundo.

Nuestras propuestas no mueren en cada temporada, si no que se adaptan a los cambios. Están hechas para acompañarte muchos muchos años.

Ellos saben viajar sin necesidad de salir de casa, su imaginación les lleva y les trae desde el centro de su reino, su habitación.

No dejes de jugar con ellos, porque te llevarán a volar a un mundo maravilloso sin salir de casa.