Manteles y servilletas de lino básicos

El lino cae con esa naturalidad que busco: abraza la mesa sin rigidez y acepta el paso del tiempo con gracia. Un mantel define el gesto. Las servilletas ponen el acento, los individuales dejan respirar la madera cuando la casa pide ligereza.

Trabajo con neutros cálidos y tonos tierra que se llevan bien entre sí, para mezclar capas sin pensar. En diario elijo caídas medias. En ocasiones, un poco más largas. La clave es que la escena se sienta fácil, amable, confortable… igual que la conversación.