Manuela sabe que es en la infancia donde se realizan los viajes más importantes, los que despegan en la imaginación. Cruzamos el pasillo para colarnos en las habitaciones más mágicas de la casa, de donde salen mariposas, animales salvajes, hadas y magos.
Desempolvamos nuestro pasaporte de viajeras empedernidas y acompañamos a los más pequeños con nuestros animales, rayas, colores, linos y algodones, en sus viajes a los mundos de Nunca Jamás.