Nos hacemos mayores cuando ya no nos hace gracia que salten encima de la cama, pero pocas cosas son más características de la infancia que un niñ@ dando botes en su cama, o mejor aún, la de sus padres, ¡que es mucho más grande!
¡Manuela, deja de saltar, que te vas a hacer daño! ¡Manuela, baja de la cama de los abuelos que la vas a romper!
¡Ni caso! Manuela sabe que es en la infancia donde se realizan los viajes más importantes, los que despegan en la imaginación, y muchas veces necesitan el impulso de una buena cama para llegar más lejos, por eso LO DE MANUELA incorpora Manuelita y nos invita a cruzar el pasillo para colarnos en las habitaciones más mágicas de la casa, de donde salen mariposas, animales salvajes, hadas y magos.
Manuela viaja a su infancia y recupera el lenguaje de los juegos, los cuentos y los jeroglíficos. Así que desempolvamos nuestro pasaporte de viajeras empedernidas y acompañamos a los más pequeños, con nuestros animales, rayas, colores, linos y algodones, en sus viajes a los mundos de Nunca Jamás. Ya tendrán tiempo de crecer, mientras tanto, nos vamos con ellos.